No es de culparlos, para mí son una especie humana como todas, pero se hacen llamar “apolíticos” para no pasar por “ignorantes”, y valga la pena resaltar lo que realmente significa ser ignorantes, me voy al diccionario a buscar el mejor concepto de la verdadera ignorancia y consigo este “La ignorancia suele entenderse de forma general como ausencia de conocimiento” y el ignorante es sencillamente “el que ignora” sobre un tema, ya sea con la intensión o sin esta, pero cuando introducimos el término “apolítico” sencillamente pienso en que es un ignorante con intensión en el tema de la política. Mi pregunta es la siguiente ¿es correcto ser apolítico? Todos tenemos una forma distinta a pensar, y eso se respeta, pero siempre y cuando vaya en el marco de lo correcto. La política es un tema de realidades que vivimos día tras día en nuestra sociedad y sobre todo en Venezuela. Ser apolítico entonces, ¿es ignorar la realidad?, mentira no es, que la inflación ha llevado a la calidad de vida a un segundo plano y el costo de esta a niveles realmente preocupantes, en donde la pobreza extrema es tal, que parece ficción y un drama viviente de muchos venezolanos.
Se comprende que las situaciones entre líderes de bandos y bandos llevan a la sociedad a un clima de verdadera confusión y decepción, es entonces cuando una persona puede decidir ser apolítico. Pero, ¿no es estar aislados de la sociedad el vivir en la ignorancia? ¿No es despreocuparse por el prójimo el llamarse “apolítico”? Yo considero que sí. Algunas de las frases que escuchamos de forma regular en ellos son, “yo prefiero ocuparme de mi trabajo y mas nada”, “yo no confió en ninguno de esos candidatos” o simplemente “no me importa la política”.
No es secreto que Venezuela está pasando por un momento histórico en el cual cada venezolano debe poner un granito de arena y quizás dos para la construcción del puente sobre el abismo en el que vivimos, y aunque se entiende la dejadez de algunos ante el tema electoral por las razones mencionadas, creo que no es excusa suficiente para ponerse a un lado y dejar en manos de otros el futuro y las decisiones. Invito a los “apolíticos” a que no sean ignorantes, que aunque suene ofensivo no es más que una palabra mal usada en ocasiones y con un concepto dócil e inofensivo, y lo más positivo, con una solución, la cual es dejar de serlo y volver al juego. Venezuela somos todos y por más que ignoremos, es utópico pensar que el aislamiento nos protegerá de los resultados en las decisiones de personas que quizá por falta de nuestro grano las están tomando. Unámonos a la lucha. Venezuela somos todos.
12 de mayo de 2010
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1 comentario:
Hay paises en el mudo donde la cultura política permite ser apolitico, en Europa por ejemplo, sin embargo la forma de hacer politica a la cual nos han acostumbrado sobre todo en los últimos once años en Venezuela no da pie a ser apolíticos, porque así no se pretenda, así no se quiera meterse con la política, entonces es la política la que se mete con uno, como tu mismo lo dices en tu artículo, alto costo de la vida, mala calidad de los servicios, y un largo etc, allí es donde la política nos afecta directamente. Excelente artículo, saludos. Twitter: @manuelsantanam
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